Es el conjunto de reformas e inversiones conexas incluidas en un determinado componente y que permiten alcanzar los efectos transformadores pretendidos en el ámbito del correspondiente componente. El Plan consta, tras la última adenda, de 31 componentes que se estructuran en 253 medidas (111 reformas y 142 inversiones)
Las reformas son acciones estratégicas previstas para reforzar y modernizar los ámbitos principales que condicionan la estructura y trayectoria económica del país y que refuerzan el impacto de las inversiones. Se definen en cambios normativos, modificación y revisión de procedimientos administrativos o actuaciones concretas de las distintas Administraciones. (Ejemplo: Reforma C1.R3: Real Decreto por el que se regulan las zonas de bajas emisiones)
Por su parte las inversiones son actuaciones que permiten operar directamente sobre la actividad económica, mediante la articulación de proyectos tractores de gran alcance que serán impulsados a través distintos instrumentos de gestión pública como puede ser la inversión directa del Estado, los convenios con las Comunidades Autónomas o Corporaciones Locales, las subvenciones para la iniciativa privada, las ayudas públicas mediante instrumentos financieros, la participación en proyectos transnacionales o proyectos importantes de interés común Europeo, la participación en consorcios, fondos público-privados o en el capital de empresas, entre otros. (Ejemplo: Inversión C13.I9: Fondo de apoyo a la solvencia de empresas estratégicas)